Fase-E - Día 5

Ayer me enteré de la muerte de Vicente, uno de los primeros tripulantes del RAW PRAWN. Un verdadero caballero, un buen amigo y hombre de mar. A lo largo de todo el tiempo que ha navegado con nosotros, ha dejado siempre un buen recuerdo en cuantos tuvimos la suerte de coincidir con él. Entusiasta, culto, siempre afectuoso, muchos de los actuales tripulantes, se incorporaron gracias a él. Además de coincidir en el mar, también lo hicimos en tierra, tuve el gusto de alojarme en su casa, de conocer a su familia y disfrutar de su hospitalidad. No me hago a la idea de que ya no volverá a estar con nosotros.

Deseo que navegue en otros mares y por supuesto permanecerá en nuestra memoria. Sean estas palabras un sentido homenaje a su recuerdo. En mi nombre, en el de la tripulación que ahora está en el barco y de toda la familia RAW PRAWN elevo mi copa para brindar por el gran amigo que nos dejó, tal y como a él le gustaría que le recordáramos: con una sonrisa en los labios, aunque tengamos el corazón herido.

Pero la vida y el viaje siguen. Hoy iremos a Herceg Novi, luego a Budva y desde allí tal vez a Cetinje. Una imagen de un velero en la bruma. Vicente ¿dónde estás? Otra de las dos islas.

 

 

 

Un crucero de vela viene a nuestro encuentro, lo que da lugar a hermosas perspectivas.

 

 

 

 

Nos amarramos a una boya en Herceg Novi y vamos a puerto para preguntar por la policía a fin de “legalizarnos” ¡no hay manera! Parece que aun siendo puerto de entrada hay que ir a otro sitio, nos limitamos a ir a la fortaleza, tomar una cerveza y conseguir algún hielo y unos bocadillos de hamburguesa. Al salir unos chicos pretenden cobrarnos 50 € por ser una boya privada, nos partimos el culo de la risa y a ellos les sienta mal, amenazan con llamar a la policía, nos reímos todavía más.

 

 

 

En el viaje hace calor, pero unos gintonics ayudan a paliarlo.

Cuando llegamos a Budva, hay que rodear una isla, ya que unos escollos impiden el paso de la bahía de un lado a otro, la casa del farero es una joyita.

 

 

Finalmente fondeamos frente a una moderna urbanización, desde allí asistimos a una hermosa puesta de sol.

 

 

Carlos

 

Interesantísimo Montenegro…… precioso lugar donde nunca se me hubiera ocurrido ir, mitad por desconocimiento mitad por lo pequeño y desconocido de su territorio.

Ayer estuvimos en Kotor, la capital, después de pasar por la entrada formada  por un valle hundido invadido e inundado por las aguas del Adriatico; Las Bocas de Kotor, visitamos su ciudad vieja, patrimonio de la humanidad, su fortaleza, etc,etc. Después cenamos un buen pescado en un restaurante  al aire libre, y dimos un paseo por sus bonitas calles medievales.

El talante y entusiasmo de la tripulación hace que lo estemos pasando (Julia y yo) estupendamente.

Ahora estamos navegando hacia Budva donde pensamos recalar hoy.

 

Julia

 

MI PRIMER VIAJE… Encantada e ilusionada de pertenecer a la familia Raw Prawn. Superadas con mucho las expectativas. Montenegro, para mí gran desconocido, es un precioso enclave natural.

Para la Crew sólo elogios, están haciendo que esta sea una travesía inolvidable.

 Gracias a todos.

 

JOSU

 

Ayer brindamos por Vicente.  Gracias a él estamos Maite y Yo hoy en el Raw Prawn. Hace unos años nos contaba entusiasmado en la bañera del Perla Negra (barco de un club de vela de Getxo del que ambos éramos miembros) mientras íbamos a Castro Urdiales sus aventuras con Marcelino. Poco después nos embarcamos también en el Raw Prawn.

Eskerrik asko Vicente. Agur eta ohore.

Pero como apunta Marcelino el viaje continúa y hay que aprovechar lo que nos quede de tiempo. Quién sabe cuánto. Carlos dice que esta aventura, la aventura de la vida, siempre acaba mal.

Este fiordo es impresionante. Bueno, dicen por aquí que en realidad no es un fiordo. Es un valle inundado, mientras que un fiordo está generado por glaciares. Ojalá hubiese algún glaciar por aquí, o por lo menos algún témpano de hielo que refrescara el ambiente. Hace mucho, mucho calor que lo mitigamos con baños en el mar. El agua está buenísima.

Hoy se ha atascado el wc de popa. Llevaba yo varios días sin hacer po-po y creo que ha salido todo de golpe. El pobre retrete no ha tenido la capacidad para tragárselo todo y hemos tenido que ayudarle achicando los restos que flotaban en el interior. Al final todos contentos. Ahora pienso que el retrete me mira con recelo cuando me acerco, pero confío que a medida que la situación intestinal se normalice volvamos a ser buenos compañeros y pierda el miedo que creo que me ha cogido.

Fondeamos en una calita cerca de Budva y hemos cenado una vainas (judías verdes) que preparó Julia. De categoría. Carlos se ha marcado un guisote de ternera que lo terminará mañana con unas patatitas. Cuando volvamos de la excursión daremos buena cuenta de él.

Ya es conocida la calidad de la cocina que se prepara en el Raw Prawn. En esta fase hemos probado pollo al curri, guisado de cerdo con especias búlgaras, revuelto de setas (saltxaperretxiko o cantarelus y boletus edulis), txipirones encebollados,… y lo que está por venir.

 

MAITE

 

Fondeados en una calita de Budva, nos damos el bañito número 100 ó 200 no lo sé, es la única forma de hacer frente a este calor, pasamos en remojo todo el tiempo que podemos jajjjaa-

La entrada a Kotor, el paseo por su fiordo, las montañas con sus ermitas, los pueblecitos perfectamente integrados en el paisaje……. Mi cabeza empezó a girar a un lado y otro sin saber dónde posar la vista. QUE PASADA!!  Me vino a la memoria una de las historias que contaba  Eduardo Galeano en su libro –el libro de los abrazos-  sobre un niño al que su padre llevó a ver el mar por primera vez, el niño abrió mucho mucho los ojos y ante tanta belleza sólo pudo decir: PAPÁ AYÚDAME A MIRAR!! Así me sentí durante todo el trayecto a Kotor, feliz pero incapaz de asumir tanta…… grandiosidad.

Durante nuestra estancia en el fiordo disfrutamos de la compañía de Pilar y Carlos durante un par de días, una delicia. Ellos continuarán conociendo Montenegro por tierra, nosotros seguiremos nuestro viaje por mar.

Ya sé que lo han contado tanto Marcel como Josu pero no quiero olvidarme de Vicente, enterarnos de su fallecimiento fue un palo, Vicente, gracias a él estamos Josu y yo aquí, fue su entusiasmo lo que nos condujo a Marcelino y al Raw Prawn, brindamos por él, le recordamos contando viejas historias, sus viajes a bordo del Raw Praw …… AGUR VICENTE eta eskerrik asko.